Radio Voces y Letras

 

 


miércoles, 18 de noviembre de 2009

Un Domingo...


Quise nacer un Domingo,
bajo una luna de estío,
saciar las promesas de aire,
vivir el destino de tantos,
la paradoja de un sueño,
aquel ideal infinito
por sonreírle a mi madre
la gratitud de su calma
y la ansiedad de la dicha
que desveló mis segundos…

Quise hechizar a las noches
creando un edén de caricias,
urdir cada paso constante,
soplar centenares de velas,
cumplir las quimeras ajenas
jugar las auroras de un niño,
volar un paisaje marino
al compás de gaviotas etéreas
y unirme en un beso dorado
a ella, a él o a quien fuera…

Quise...
Amar con locura la vida.

Vaga mi alma entre sombras,
sin comprender esta sangre,
aborto letal y cobarde,
deciden mis padres, mi muerte.

Quise nacer un Domingo,
bajo una luna de estío…
Sueño de luces y aromas
adiós, canto de amor,
dulce vida…

Ignacio Araya Dinamarca
18/11/2009

De tus ojos...



Así son tus ojos.
El iris de melancolía
y un ardiente aura
que danza en sus pupilas,
como lucero celeste,
titilante, altivo, humano,
girando en torno a la luna,
Selene de mi cuerpo
y uno a uno, cada rayo cristalino
convierte en Venus
tu silueta de musa…

Como faroles de mares,
fulgor de notas suaves
de luciérnagas bohemias.
Fuego que convoca
añoranzas de mi alma
henchida de Eros,
un hontanar de sueños
que destila tu mirada,
donde florecen las ansias
y el suspiro por tus labios…

Ignacio Araya Dinamarca
16 de Noviembre de 2009

domingo, 8 de noviembre de 2009

Desde el fondo de la tierra...


¿Qué clama un grito

desde el fondo de la tierra?,

¿Qué arma osa un disparo

no habiendo una guerra?,

¿Qué poema surca los aires

sino existe el amor?...

Habla una sufrida natura,

mientras el sol se desliza

por un profundo abismo

y la caricia humana

hoy es efímera causa,

ya no hay más rayos del cielo,

sino fuego de maldades,

sólo manos crispadas

asesinando un planeta,

cortan alas, siembran miedo,

y no hay escudo que pueda

parar una sola bala...


Desde el fondo de la tierra,

un niño, un pobre, un árbol,

reclaman el último auxilio

a una criatura de antaño,

llamada, ser humano...


Ignacio Araya Dinamarca

01 de Noviembre de 2009