Amor Eterno...

Recuerdas esos besos infinitos, alienados,
las caricias desnudadas, escondidas,
la aventura juvenil de vivo encanto,
esa magia de miradas, titilantes, decididas.

Y estos años que han pasado como rayos,
nuestros cuerpos ya cansados, silenciosos,
la vejez invitó a la soledad inesperada, deprimida,
a los sufridos resplandores de la inercia, de la nada…

(Dame tu mano,
como antes, colegiales,
deambulemos por las calles,
en silencio, intocables,
frescos bríos me contagian,
renovados, pasionales,
juntos, siempre juntos,
conmovidos, delirantes)

Recuerdas las promesas que unidos invocamos,
el amor eternamente, nos juramos, lo sellamos,
aquel árbol es testigo de aquel lazo impenetrable,
corazones dibujados, diminutos, celestiales.

Que nos queda, amor mío, que nos queda.
Ya los hijos han partido, emulando nuestro ciclo,
hemos cumplido, con barreras, con martirios,
nuestros sueños, esperanzas, los destinos de la vida...

(Dame un beso,
amada mía, como antaño,
somos viejos, pero sólo de los años,
te amo, como un loco,
por siempre y para siempre,
inmortales, jubilosos,
amor que no fallece,
sigue vivo, sigue intacto)


Recuerdas las pasiones cohibidas, estelares…
¡Juventud, has regresado, al final de nuestros años¡…

Paisaje de Amor...

Solos, amor, solos…

Y este río colorido,
ondulante, complacido;
esos árboles frondosos,
ancestrales, vigorosos;
esos cerros imponentes,
veleidosos, titubeantes,
¡¡Que angélicas miradas
refleja esta agua clara¡¡…

Murmullos consonantes,
aves libres, delirantes;
maravillas perfumadas,
flores tiernas, delicadas;
cervatillos elegantes,
alegrías desbordantes,
¡¡Que magníficas caricias
surcan el atardecer radiante¡¡...

Una estrella se vislumbra…

Solos, amor, solos…
¡¡Que paisaje nos abraza¡¡

La Infidelidad...

Pasaste por mi lado,
juvenil, soberbia y pretenciosa.
Sonreíste, y te quedaste
arrullada por mis placenteros brazos.
Quise probar de tus manjares prohibidos,
de tu candorosa amistad me hice adicto,
vanidad regalaste a mi alma inquieta,
claridad a los días ya sin calma,
rutinarios, desdichados,
amargados…


“Corazón, confía en mis encantos”, susurraste,
“aférrate de mis locuras, cúbrete de mis caricias,
prueba de mis ardientes licores perfumados,
codiciados, envidiados”
Y se sedujo de tu magia.
Y degustó de tu malicia,
de tus vinos, tus riquezas,
tu infinito manantial de las lujurias,
atrapado, hechizado,
encadenado…


Mas mi cuerpo entró en un caos,
sumiso se mantuvo a tus designios,
contemplativo ante los lindes del abismo.
Pero mi alma se aburrió de tu sarcasmo,
vil e histriónico demonio,
traidora indecorosa, corrupción de mis esencias;
y yo aguerrido, vencedor de mil batallas,
conseguí al fin escapar de tus cadenas,
glorioso, iluminado,
victorioso…


Mi corazón ya no te extraña,
y sonríe con sereno regocijo,
sabiendo que te fuiste para siempre…
No volverás, aunque me tienten nuevamente tus encantos...

Cansancio...

Ya cansado estoy…

De las lágrimas vertidas en mi lecho,
de los gritos atrapados en mi pecho,
de los miedos enfrentados en mi alma,
de los celos que carcomen mis entrañas…

De luchar por el amor que se me arranca,
de vivir en tempestad con la nostalgia,
de correr para lograr lo que otros sueñan,
de clamar por libertad a mis andanzas...

De los sueños imposibles que descansan,
del quejido de la gente en su bonanza,
del dolor de la pobreza que desgarra,
de la apática justicia que no alcanza…

Y me ahogo en este mar de mis lamentos,

el cansancio ya agotó mis esperanzas…

Te Miro...

Te miro como nunca nadie te ha mirado,
sendero de la luna, cascada de milagros,
surco de la tierra, caracola del ensueño.
Eres como el cielo en ancestral suspiro.
Te pareces a la hierba en el alba humedecida,
te miro como un loco tus líneas escondidas.

(Desnuda entre las rocas,
tu esencia que me llama,
mi cuerpo se alborota,
mi boca te reclama,
calores de lujuria
siente mi alma llana)

Te miro como nunca nadie te ha mirado,
cuerpo de sirena, extravío de marinos,
desierto no explorado, paraíso del encanto.
Eres como el anochecer en un día ya cansado.
Te pareces a la nieve con su albura relucida,
te miro como el ave a su presa ya encontrada.

(Colmada de pasiones,
locura desbandada,
mi carne se atormenta
con el perfume de tu vaina,
sueños de lascivias
idea mi mente insana)

Te miro como nunca nadie te ha mirado.
Empieza la función...dos almas se desmayan…

Pasiones Juveniles...

Desde mi ventana, vi por primera vez sus rizos otoñales,
su silueta radiante como la aurora de sinuosos manantiales,
su cara de mujer madura, fiebre de locuras siderales,
reflejo de maestra en las artes de sucesos pasionales.

Magia de mi juventud, ávida del estreno de la caricia embravecida,
quise penetrar su mundo de lujuriosa adultez ya saboreada,
descubrir los misterios del amor en su suave zona enmarañada,
sofocar la pasión en mi búsqueda de carnales embestidas.

Pensaba en poseerla, fruto prohibido de insidiosa rama,
deseaba dibujarla, con pinceles de fuego, febriles llamaradas,
procuraba que me viera, pero sus ojos divisaban otras cálidas miradas.

Desde mi ventana, vi por última vez su figura de sirena.
Mi infantil locura conservó su imagen esa noche desolada,
recosté mi cuerpo y soñé, sonriente, con su tibia y desnuda piel lozana.

Gritos del Dolor...

Es el fruto de nuestro amor, Dulzura Mía, que duda cabe...

No llores así, por favor, Amada mía, mi corazón se abruma al ver tus ojos tristes, mí ser se inquieta al ver tu faz de niña irradiar tantos lamentos, no puedo soportar ver tu alma llorar por esto, esto que alguna vez planeamos, esto que alguna vez soñamos…Pero, ¿Por qué lloramos? Debemos estar alegres, en tu vientre crece la ilusión de nuestras vidas, la ventura de nuestros besos, la esperanza de nuestros cuerpos…brindemos por esta felicidad; quien daría lo imposible por vivir lo que ahora estamos viviendo, no es un sueño, es cultivar nuestra semilla en este mundo. Regocijémonos de llevar esta nueva luz a nuestros días, bebamos del jubiloso licor de la hermosura y así, amor, así, enfrentaremos este nuevo mundo de ternuras…¿Por qué lloramos, amor, porqué lloramos?...Aún no comprendo…si es un regalo de Dios este momento…

Si, lo sé. Tus padres no están de acuerdo con esta idílica aventura, lo sé y no lo comparto. Pero, ¿Qué tiene que ver eso con la indiferencia por esta tierna criatura?...Si, lo entiendo, eres muy joven. Pero dime…que mejor que tener la juventud de nuestro lado, diles que me muestren la diferencia del que ser mas adulto es más merecedor del bien de la existencia. ¿Acaso no lo saben?...Nadie conoce a la perfección el arte de ser padres, ni siquiera aquellos que tienen varios nacimientos; ellos aun siguen aprendiendo, como la primera vez…Lo haremos juntos, amor, que miedo tenemos, que temores enfrentamos…Mírame, seré tu voz de lucha en esta causa, seré tu fortaleza en las torturas, seré tu bastión en las flaquezas… Cree en mi, primor, cree en mi, es todo lo que pido…cree en mi y en lo que tu piensas…

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Oh, amada mía, cada día más pretextos… que tu linaje no se compara con el mío. ¿Eso arguyen?...Vamos¡¡¡ Conozco la diferencia...yo soy pobre, lo entiendo, pero tengo fuertes manos para trabajar en lo que venga; esfuerzo es mi valía, tesón es mi coraza. Mis manos te darán todo lo que quieras y lo que nuestro hijo quiera… ¿No entienden eso? Es el amor el que guía mis más puros sentimientos…

¡¡¡Un aborto¡¡¡. No mi amor, por favor, no dejes que hagan esto…Que nos hagan esto…No lo permitas…Lucharé con puño y lanza para que esto no sea cierto…Quien es capaz de tramar esta macabra idea, escena siniestra para nuestras ilusiones…No, mi amor, no. Destrozarán nuestras vidas merced a un capricho de padres en penumbras, ciegos de futuro, rocas de sentimiento, sin sol que ilumine sus pensamientos… Es un sueño, verdad Dios, ¡dime que es un sueño¡ Despiértame, que no soporto este castigo…No nos hagas esto Creador, que mi alma no consiente que esto pueda estar pasando…

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Amada mía, mi alma llora…se ha llevado a cabo el oscuro plan de tus mentores. Oh, amor, ¿Qué es lo que te han hecho?...Si ya casi no te veo…Eres un ente en las penumbras. Siento tu corazón inerte, tu alma muerta…te veo fallecer a cada instante…la locura ya absorbió por completo tus sentidos…

Yo estoy casi loco, mi amor, mi alma ya agotó sus lágrimas de río, mí corazón esta enlutado, negro, ya extravió su rojo inmaculado…Es solo que…no puedo ya dormir. Ese hijo…era mío…sigue siendo mío. Y lo veo en todas partes, como pidiendo auxilio, oigo su llanto delirante que desgarra mis entrañas…siento sus gritos de dolor, lamentos abrumados de un alma que nunca alcanzó a florecer…Oh, criatura mía, sé que jamás comprenderás las respuestas que te pueda yo entregar…

No, no estoy casi loco…estoy loco, mi amor…Oh, que veo; razón, vuelve a mi y dime lo que veo…Dulce hijo, no me mires así, te lo suplico, no me ataques…Pero, ¿que haces? No, tu madre no, no reproches a tu madre, no reniegues de tu madre…Dímelo a mi, dímelo a mi…tal vez sea yo el único culpable…

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Era el fruto de nuestro amor, Dulzura mía, que duda cabe…

Estamos locos, lo sé, estamos locos…Nuevamente rompo en llantos, el río de mi alma recuperó sus aguas de tristeza…Pero, que me pasa… que es lo que haces vil conciencia…oh no…

¡¡¡Pude haber hecho algo mas¡¡¡…¡¡¡Pude haber hecho algo más¡¡¡…

Frente al Espejo...

Espejo, que fría imagen exhibes esta mañana,
no me mires, con ese rostro de melancólico semblante,
estás cansado, ¿verdad? , que no irradias esas ganas
de otros días, donde lucías, ese tan vivaz desplante…

Espejo, que te pasa, presiento que algo escondes,
te siento triste, indefenso, eclipsado por las sombras,
cual es la pena, dime amigo, que funesto mal padeces,
advierto tu frialdad, como una criatura en las penumbras…

Espejo, por favor, quiero verte mágico, divino,
nos espera un lindo día, mira al sol en dulce danza,
¡¡Arriba, sube el ánimo¡¡, sé optimista, te lo pido,
Sonríe, amigo mío, dame luces de esperanza…

Y así…refunfuñando…
Me brindó una leve... pero jovial sonrisa…

Pregunta Misteriosa......

Una Paloma me preguntó en la mañana:
“¿Quien es la mas bella, de todas las bellezas del Universo?”
Yo respondí, dubitativo:”Eres tú, avecilla hermosa,
por que simbolizas la blancura de las almas,
por que encarnas la amistad de nuestras tierras,
y, con tus abiertas alas, representas la libertad y la armonía.”

Oh¡¡¡…Misteriosa realidad…

Una Flor me preguntó en la fría tarde:
“¿Quien es la mas bella, de todas las bellezas del Universo?”
Y Yo le dije:” Evidentemente tú, exquisita y fresca joya,
por que alegras los tristes paisajes de estos rumbos,
nos regalas los perfumes más encantadores del idilio,
por que reinas, tiernamente, en los confines de este mundo”

Oh¡¡¡…Asombrosa realidad…

La Luna me preguntó esa misma tarde:
“¿Quien es la mas bella, de todas las bellezas del Universo?”
Yo contesté, sutilmente: “tú, melancólico lucero,
por que brillas y dominas los rincones de los cielos,
iluminas las estrellas de la oscura y fría noche,
por que eres musa inspiradora de poesías y de cuentos”

Oh¡¡¡…Fascinante realidad…

Al día siguiente, las tres volvieron juntas y en iracundo coro me dijeron:
“Que ambiguo eres, inocente ser confuso, reiteramos la pregunta:
¿Quien es la más bella, de todas las bellezas del Universo?
Ahora resuelve, que en el acto, requerimos tu respuesta”
Y esta vez, decidido, les grité: “¡¡¡La Mujer¡¡¡,¡¡¡La Mujer¡¡¡,
pues, reúne en una sola, todas vuestras hermosuras”.

Oh¡¡¡…Deslumbrante realidad…

Me miraron, sonrieron y se fueron. Ya me iba, cuando veo, atónito,
que desde el cielo cae, oscilando, un papel dorado que decía:
“Tu respuesta es la más sincera que alguien nunca nos ha dado.
Jamás titubees ante esta interrogante, por que, de verdad,
las Palomas, las Flores y la Luna somos simples ornamentos,
diminutas maravillas, al lado, de lo que es y será, siempre, una Mujer”

A lo que yo digo, simplemente, Oh¡¡¡…Es verdad, es verdad…

Pienso en Ti...

Pienso en ti…

Cuando la luna asoma, nívea y clara, en el ocaso del día moribundo,
cuando las flores retratan maravillas en los jardines de este mundo,
cuando las aves entonan melodías en sus selectos galanteos matutinos,
cuando camino, triste y solo, por las calles sin tener en claro mi destino…

Pienso en ti…

Cuando confundo tú mirada, tierna y pura, con el fulgor de las estrellas,
cuando descubro tú sonrisa, dulce y llana, en la simbología de las nubes,
cuando percibo tus caricias en la serena brisa que me alcanza,
cuando me apresa tú perfume en la quietud de la noche reposada…

Pienso en ti…

Al ver la lluvia, detrás de mi ventana, como mustias lágrimas divinas,
al levantarme y espiar al sol con su resplandeciente luz que guía,
al recorrer el tránsito normal de mi día siempre rutinario,
al meditar por todos los momentos ya vividos, sin tenerte…

Pienso en ti…

Porque me irrito con todo lo que sucede aquí a mi lado…
Y el tiempo…necio tiempo, parece que no avanzaras…

Mi Primer Amor...

Mi memoria no ha olvidado jamás los recuerdos de mi primer amor…

Llegaste en una tarde como aparecida de una fábula de flores, a interrumpir mis tiernos juegos infantiles, a alborotar mi corazón de niño descarriado, a despertar las llamas internas de mi volcán en crecimiento. Te miré. Tú me miraste. Y nuestras miradas se fundieron en una sola, como se juntan dos palomas en el cielo, en idílico momento. La saeta del amor hirió muy fuerte mi cascaron de frágil compostura, así como el mar en furibundo choque embiste los cantiles de su orilla…

Fue como un temblor que recorrió pausadamente mi cuerpo, como esa sensación extraña que se padece al explorar una nueva aventura de la vida. Advertí un cambio en el mundo, en mi mundo, como si al despertar de un dulce sueño, todo lo cercano transformara su apariencia. Ya no estaban los mismos colores, ni los mismos horizontes, ni los pensamientos, ni las mismas emociones; nada, nada era lo mismo. Algo cambiaba en mí existencia…

¡¡Que hermosa eras¡¡ Como no recordar tu silueta de escultura bien tallada; tus ojos, dos luceros, que ni las estrellas mostraron tal fulgor en sus mejores obras nocturnas estrenadas; tu pelo, rubio como la miel, suave como la seda, largo como las hojas de aquellos antiguos sauces coloniales; tu boca ,ay, esa boca que posó sus labios en mis labios y explotó mis más recónditos deseos, manjar divino, dulce como un jardín colmado de frutillas. Ay, ¡¡ Que hermosa eras¡¡¡…

Como olvidar esas interminables caminatas por la arena, abrazados, como ebrios de pasión desenfrenada, con aquella luna vigilante, testigo silencioso de nuestras joviales travesuras. Como olvidar esas hermosas veladas compartidas, solos los dos, a la luz de unos brillantes cirios de colores, cómplices inertes de nuestras furtivas miradas, de los ocultos placeres, de inocentes caricias. Como olvidar el fruto esplendoroso de tu cuerpo sin vestidos…

Y así como apareciste, así también marchaste. No sé hacia que horizontes tus nobles alas te llevaron, casi sin darme cuenta, como los pájaros que emigran cuando deben recorrer nuevos rincones habitables. Solo me quedó una descolorida fotografía de tu estancia, guardada en los valiosos tesoros de mi alma…

Ayer te vi pasar, después de muchos, pero muchos años... Ya no somos los mismos .El tiempo ha transformado nuestros cuerpos. Quise hablarte, tocarte, sonreírte... Mas no me conociste o simplemente me ignoraste… Hoy busqué nuevamente aquella foto atesorada en mis recuerdos, cada vez más gastada por la marca de los años. La observé por largo rato, obsesionado por la memoria de tus pasos…hipnotizado por las huellas que dejaste…

Y así prefiero recordarte…

En fin, después de todo, ya no somos los mismos…

Al Padre Celestial...OH Mi Dios...

Padre Mío, que estás en todos los rincones de este mundo,
Creador de la presencia mía en cuerpo y alma
déjame retratarte con versos de esmeraldas
para agradecerte mis vivencias, mi existir, mis añoranzas.

Porque en momentos de venturas y de gracias,
de alegrías, festejos y bonanzas, jamás recordé tu gala,
mas en momentos de tristezas y lamentos,
de agonías y quebrantos, mí boca se llenó de tu nombre inmaculado…

Gracias, Amigo Mío, por tú presencia en todos mis sucesos,
te siento aquí en mi alma, como brisa soplando en suave danza ,
Omnipresente manantial de aguas de gloria,
Celestial ángel de amor, timón de todas mis esperanzas…

Así Sea…

No Merezco.....

No merezco, Amada Mía, el Amor que me prodigas,
tu mirada misteriosa que enloquece mis sentidos,
tu sonrisa luminosa que alborota mis latidos,
las caricias perfumadas de tus besos encantados.

No merezco, Vida Mía, la Pasión que me provocas,
mi corazón no abraza tus palabras de esperanza,
mi pequeñez no entiende tus febriles añoranzas,
la sublime sencillez de tu dulzura enarbolada.

Si mereces, tú, Lucero Mío, el Amor que te profeso,
por ser gran mariposa en mi jardín de ensueños,
por ser dulce sirena en este Océano fecundo,
atrapado estoy, feliz, en tus redes de infinitas maravillas.

Y por eso te amo….Por que mereces que te ame...